domingo, 17 de noviembre de 2019

Consejos para el desarrollo del lenguaje


-  Habla a tu hijo. Aprovecha cualquier situación para “conversar”; si estás cocinando: “Mira, esto es una cebolla” o “¿a ti te gustan las zanahorias?” mostrándole una.  Hablándole siempre con palabras cortas y frases sencillas, e ir aumentando  poco a poco la dificultad.
-  Prestar atención y responder a cualquier intento de comunicación del niño.
-  No interrumpir  el discurso del niño para corregirle ni obligarlo a repetir lo que ha dicho mal. Es recomendable, en lugar de eso, repetir lo que ha dicho el niño de una forma correcta, por ejemplo: el niño dice “pelito bueno” y el adulto responde “tienes razón, ese perro es muy bueno.
-  No repetir el adulto aquellas palabras, que a pesar de parecer graciosas, el niño pronuncia mal.
-  Utilizar la expansión.  Cuando el niño dice frases de una palabra, como “agua”, el adulto le contesta: “¿Quieres agua? Pues te daré agua en tu vaso azul.”
-  Anímalo a pedir aquello que desee. Evitar dar por sentado que entiendes sus gestos para que el pequeño se esfuerce en su necesidad.  
-  No responder en su lugar. Cuando alguien le pregunte dejar que el niño conteste aunque diga cualquier respuesta y no sea lo esperado.
-  Mantén la calma si tu hijo se acerca para contarte algo. Dale la oportunidad de hacerlo a su ritmo y no lo interrumpas.
-  Contar cuentos a diario. Un momento muy adecuado es justo antes de irse a dormir, tenerlo como una rutina más del día a día.
-  Cantarle canciones.
-  Jugar a soplar. Hacer pompas de jabón, hacer girar molinillos, soplar bolitas de papel haciéndolas correr hacia distintos lados, hacer pedorretas, etc.
-  Jugar a emitir sonidos, bien de acciones de objetos (sonido de un timbre, de campanas, de una sirena…)  o de onomatopeyas de animales.
-  Ejercitar los órganos que intervienen en la fonación: con la masticación (evitando  comidas en pasado), mandar besitos, hacer gárgaras…
-  Evitar el uso de chupete.